INVERSION CANADIENSE IMPULSA LA BÚSQUEDA DE LITIO EN EL CHACO PARAGUAYO
Cinco empresas vinculadas a una compañía canadiense analiza zonas del Chaco y ha invertido 30 millones de dólares en la primera etapa, según anunció Mauricio Bejarano, viceministro de Minas y Energía, subordinado al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones.
El objetivo es industrializar el litio y lograr rentabilidad económica. Esta iniciativa representa un paso significativo hacia la transformación de recursos naturales en productos valiosos, con el potencial de impulsar la economía local y regional.
Este desembolso financiero tiene como objetivo el desarrollo de una industria que posicione al país como un miembro clave del conocido Triángulo del Litio, el triángulo del litio lo completan Argentina, Bolivia y Chile. Hasta la fecha, se han destinado 30 millones de dólares para la exploración de litio en diversas áreas del Chaco paraguayo.
En una entrevista con medios estatales, Bejarano aclaró que el Estado no realiza inversiones en la exploración de litio, sino que se limita a conceder las autorizaciones pertinentes, debido a que el subsuelo de Paraguay pertenece al Estado.
Inversión Canadiense
Empresarios canadienses lideran la explotación y han confirmado que la inversión es privada.
Estos empresarios han pedido permisos para explorar, considerando que los recursos pertenecen al Estado. Han dirigido una petición tanto al Viceministerio de Minas y Energía, dependiente del Ministerio de Obras Públicas, como al Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES).
La empresa asociada se llama Valdor Technologies, que también ha invertido capital en proyectos situados en Argentina, Estados Unidos, según mencionó Díaz Mallorquín. Esta compañía emplea tecnologías innovadoras que no dañan el medio ambiente, destacando su no dependencia del agua dulce.
La empresa ha establecido un campamento central en Filadelfia para las labores de prospección, dotado con un equipo de 10 geólogos y el apoyo de técnicos y personal de logística.
Según la legislación paraguaya, se concede un plazo inicial de un año para la prospección, con la posibilidad de extenderlo por un año adicional. Posteriormente, la fase de exploración tiene una duración máxima de tres años, al término de los cuales se evaluará la viabilidad de continuar con el proyecto, basándose en un análisis detallado de los beneficios económicos esperados de la inversión.
La fase final, dedicada a la explotación, se inicia tras adquirir el litio. «La industrialización y comercialización del litio marcan el comienzo de la minería en sí», detalla el geólogo. Con una inversión proyectada de 700 millones de dólares, se busca producir carbonato de litio, lo cual, de acuerdo con Díaz Mallorquín, fomentará el desarrollo de industrias conexas.